LA ODISEA
La odisea empieza en Grecia años después de la Guerra de Troia. Odiseo, el rey de Ítaca, no ha logrado volver a casa y muchos creen que está muerto. Sabemos desde el principio de la Ilíada que eso no es la verdad. Se lo llevaron preso a la isla de la diosa Calipso. De hecho, es prisionero del amor. Además, Poseidón, el dios del mar, no está contento con Ulises y no está dispuesto a dejarle volver a casa. En Ítaca, la esposa de Ulises, Penélope, esta llena de pretendientes que quieren casarse con ella ahora que su esposo no está. La diosa Atenea, quien ha sido siempre una amiga de Ulises, guía a su hijo, Telémaco a que vaya en busca de información sobre su padre. Primero, Telémaco va a Pilos para visitar al rey Néstor, que le da una muy buena acogida, le da de comer y le dice que vaya a ver al rey Menelao en Esparta. El príncipe itacense lo hace y se entera de que su padre está vivo y de que es prisionero en la isla de Calipso En Olimpos, donde los dioses pasan el rato, Atenea